Ante los hechos ocurridos el pasado 19 de junio en
Nochixtlán, Oaxaca, manifestación portentosa de la sinrazón característica del
Estado mexicano, la Asociación de Filosofía y Liberación - México no se
pronuncia sólo en favor del esclarecimiento de los hechos (en sí mismos
evidentes) ni por la captura, juicio y castigo de los autores materiales.
Nuestra Asociación, siempre comprometida con la liberación cabal de los
oprimidos y explotados, se pronuncia realmente por el fin inmediato de un
régimen que ha olvidado desde su origen los principios más elementales de la
democracia y la búsqueda del bien común.
Con un puñado de políticos que han terminado por
hacer de las instituciones un feudo personal con el cual erigirse como señores,
los llamados al diálogo y a la conciliación pacífica de las diferencias parecen
ciertamente insuficientes. Ahí en donde la imposición, la violencia y la
inequidad se han convertido en la norma, el estado de rebelión y la coerción
legítima de las víctimas es un deber cuya evasión sólo traería consecuencias
cada vez más negativas.
La represión brutal de pobladores y miembros de la
CNTE, efectuada por el gobierno mexicano a través de la policía federal que él
comanda y cuyo saldo es hasta el momento de 8 personas muertas, 45 heridos y 22
desaparecidos, no puede caer (como tantas otras atrocidades cometidas en el
pasado) simplemente en el olvido. El llamado es, pues, a asumir una actitud
crítica ante los recientes acontecimientos y manifestarla por todas aquellas
vías que permitan construir una consecuente y siempre comprometida praxis de
liberación. La violencia sistemática que ejerce el gobierno de Enrique Peña
Nieto en contra del pueblo mexicano, debe ser, nacional e internacionalmente,
conocida, denunciada, juzgada y sobre todo enérgicamente combatida.
Enrique Dussel
Asociación de Filosofía y Liberación - México
Ciudad de México, México
20 de junio de 2016